Este enfoque lúdico le dio a Sofía suficiente distancia emocional para desafiar su miedo. Las reuniones se volvieron menos intimidantes a medida que se recordaba a sí misma que sus pensamientos no eran hechos.
Organizar las tareas por nivel de importancia puede ayudarte a reducir la ansiedad y mantener el enfoque en lo que realmente importa. Prioriza tus tareas y enfócate en completar las más importantes primero.
Blanca Garcia Grau es psicóloga especializada en la atención a adultos y personas de la tercera edad.
Establecer límites y aprender a decir «no» cuando sea necesario es fundamental para reducir la ansiedad y proteger tu bienestar. Aprende a priorizarte a ti mismo y a establecer límites saludables en tus relaciones y compromisos.
Esta distancia te permite reevaluar la situación de manera lógica. Las investigaciones en TCC muestran que ponerle nombre a las emociones lessen su intensidad y fortalece la regulación emocional.
Analiza tus pensamientos: pregúntate si la situación realmente representa un peligro y analiza la probabilidad de que ocurra lo que temes.
Hay que escuchar por varios segundos o minutos, respirar, soltar el cuerpo, cerrar los ojos y concentrarte en la música que estás escuchando, para volver a tu trabajo o actividades una vez que te sientas relajado.
Práctica un estilo de vida saludable: Los hábitos saludables como puede ser el ejercicio normal, una alimentación más saludable y realizar hobbies que te permitan liberar la tensión puede ayudarte a calmar los ataques de ansiedad.
Los alimentos procesados y azucarados pueden aumentar los niveles de ansiedad y afectar negativamente tu estado de ánimo. Intenta reducir el consumo de estos alimentos y opta por opciones más saludables, como frutas, verduras y alimentos integrales.
Enfocarse en una tarea a la vez puede ayudarte a reducir la ansiedad y aumentar la productividad. Evita la multitarea y concéntrate en completar una tarea antes de pasar a la siguiente.
¿Qué es read more la ansiedad? Encontrar apoyo para superar la ansiedad Ponerle nombre a la ansiedad la externaliza, y la convierte de una sensación abrumadora y vaga en una “cosa” específica y manejable.
Para algunas personas, la ansiedad puede necesitar un tratamiento profesional que ayude a gestionar sus síntomas a largo plazo. Aquí algunos de los tratamientos más comunes:
Quéday dónde estás: Escapar o huir de la situación no es una buena estrategia para manejar el ataque de ansiedad. Lo mejor ante estos instantes es intentarte darte una oportunidad para enfrentar estos miedos, es decir, aprender a que no existe ningún peligro a pesar de que lo percibas así.
La meditación de atención plena o Mindfulness es una práctica antigua que consiste en centrarse en el momento presente y aceptarlo sin juzgarlo. La práctica standard de la atención plena ha demostrado reducir la ansiedad y el estrés al promover la relajación, aumentar la autoconciencia y fomentar la resiliencia emocional.